Reserva algunas frutas y el almíbar de las cerezas, con media taza de crema de leche. Ahora licua el resto de las cerezas, las fresas y las moras.
Lleva este jugo a una olla a fuego medio. Agrega dos cucharadas de azúcar pulverizada. Deja que se concentre y espese bien esta salsa y retira del fuego. Deja enfriar a temperatura ambiente.
En 1/3 de taza de agua caliente vierte la gelatina sin sabor y mezcla bien.
Ahora en un recipiente mezclamos el queso crema, la crema de leche y el azúcar pulverizada. Bate constantemente hasta obtener una mezcla consistente. Ahora vierte la gelatina sin sabor sin dejar de mezclar.
Agrega por último el dulce de frutos rojos y sigue mezclando durante 1 minuto más. Llevar a un recipiente y refrigerar durante dos horas. Mezcla el almíbar de las cerezas con la media taza de crema de leche que reservaste.
Agrega por último el dulce de frutos rojos y sigue mezclando durante 1 minuto más. Llevar a un recipiente y refrigerar durante dos horas. Mezcla el almíbar de las cerezas con la media taza de crema de leche que reservaste.